Un hombre resultó gravemente herido la noche del pasado martes en Calama, tras ser apuñalado en varias ocasiones por una pareja de delincuentes que lo interceptó en calle Abaroa, en pleno centro de la ciudad. El ataque comenzó con golpes de puño y pie, y culminó con una serie de estocadas que dejaron a la víctima con lesiones graves.
El violento incidente ocurrió cuando los atacantes siguieron a la víctima, lograron desestabilizarla y proceder a agredirla, todo a la vista de los transeúntes. Un detective de la Policía de Investigaciones (PDI) que transitaba por el lugar presenció el ataque y, tras identificarse como funcionario policial, intervino para detener la agresión, logrando capturar a uno de los atacantes. El segundo fue detenido una cuadra más adelante gracias a la intervención de testigos que evitaron su fuga.
El subprefecto Esteban Sessarego, jefe de la Brigada Investigadora de Robos (Biro), calificó el hecho como un «homicidio frustrado», destacando la rápida intervención del detective para evitar que la agresión tuviera consecuencias fatales. El fiscal Raúl Marabolí también valoró la actuación del funcionario, quien impidió la consumación del crimen.
La víctima fue trasladada al Hospital Carlos Cisternas, donde se informó que está fuera de riesgo vital. Los agresores fueron identificados como un chileno adulto, con antecedentes policiales, y un menor de edad de nacionalidad venezolana. Ambos se encuentran detenidos.